El Real Decreto 253/2025, de 1 de abril , introduce nuevas obligaciones de información financiera que suponen cambios significativos en el Reglamento General de las actuaciones y los procedimientos de gestión e inspección tributaria , aprobado por el Real Decreto 1065/2007. Esta modificación normativa, que entrará en vigor el 1 de enero de 2026 , tiene como principal objetivo reforzar el control de la Agencia Tributaria sobre las operaciones financieras , afectando directamente a autónomos, empresas y particulares.
Entre los cambios más destacados se encuentra la eliminación del umbral mínimo de información para cobros por medios electrónicos y la ampliación del alcance y periodicidad con la que las entidades financieras deben remitir información a Hacienda.
Objetivo del nuevo Real Decreto: lucha contra el fraude fiscal
Con esta reforma, Hacienda busca intensificar la vigilancia sobre las operaciones financieras, especialmente aquellas vinculadas a actividades económicas no declaradas, fraude tributario o uso indebido de medios de pago electrónicos.
El nuevo sistema se basa en una transparencia más exhaustiva, exigiendo a las entidades financieras y plataformas de pago el envío mensual o anual de datos, incluso en operaciones de pequeña importación que antes no eran reportadas.
Principales novedades introducidas por el Real Decreto 253/2025
- Eliminación del umbral de 3.000 euros para informar sobre cobros electrónicos
Hasta ahora, los bancos y entidades de pago estaban obligados a informar a Hacienda cuando los cobros mediante tarjetas o plataformas como Bizum superaban los 3.000 euros.
Con la nueva regulación, desaparece ese límite. A partir de 2026:
- Las entidades financieras deberán reportar mensualmente todas las transacciones comerciales electrónicas, independientemente de la importación.
- Esta medida afecta especialmente a autónomos y empresas que reciben pagos a través de terminales TPV, Bizum, transferencias inmediatas, etc.
- Seguimiento de operaciones con tarjetas de particulares
A los particulares también les afecta esta reforma, aunque de forma diferente. Desde el 1 de enero de 2026:
- Las entidades financieras deberán informar anualmente sobre los movimientos realizados con tarjetas bancarias si la importación total anual supera los 25.000 euros.
- Se incluyen tarjetas de crédito, débito, prepago y virtuales.
Esto implica que Hacienda podrá disponer de información detallada sobre los hábitos de consumo cuando se superen ciertos umbrales.
- Información mensual sobre cuentas bancarias de residentes en España
Otra modificación relevante afecta a la periodicidad del reporte sobre cuentas bancarias:
- Las entidades deberán remitir a Hacienda, de forma mensual, información sobre:
- Titulares, representantes autorizados y beneficiarios.
- Saldos medios y finales de cada cuenta.
- Esta medida refuerza la capacidad de la AEAT para detectar inconsistencias o movimientos irregulares de fondos.
- Control reforzado sobre operaciones en efectivo
Se mantiene la obligación de informar en efectivo superior a 3.000 euros, pero se amplía su alcance:
- También estarán obligadas a informar a entidades de pago y compañías extranjeras que operen en España.
- Esto refuerza el control de movimientos que, habitualmente, existían al margen del sistema bancario formal.
¿Cómo afecta esta normativa a autónomos y empresas?
La reforma introduce una mayor responsabilidad fiscal y contable para quienes desarrollan actividades económicas.
Desde 2026, los autónomos y empresarios deberán tener en cuenta que:
- Todos los cobros recibidos a través de medios electrónicos, incluido Bizum, estarán bajo control tributario.
- Es esencial reflejar fielmente todos los ingresos en las autoliquidaciones trimestrales y anuales.
- La falta de declaración o discordancia con los datos facilitados por las entidades financieras podría derivar en comprobaciones y sanciones.
Sanciones por incumplimiento
La Agencia Tributaria podrá imponer sanciones de hasta el 150% de las cantidades no declaradas, especialmente si detecta intencionalidad en la ocultación.
Conclusión: más control, más transparencia y más responsabilidad
El Real Decreto 253/2025 supone un paso decisivo hacia la digitalización y el cruce automatizado de datos financieros, otorgando a Hacienda una mayor capacidad de seguimiento de las actividades económicas.